Cuando tenés un bebé y le estás cambiando los pañales, limpiándole la mierda del culo, siendo vomitado las 24 hs. del día, mientras no dormís para alimentarlo; sería de deforestado mental, increpar a esa criatura con preguntas del estilo: “¿cuándo te vas a limpiar solo?” “¿por qué no te cocinas y comés los mejores alimentos del mundo?” “¿Por qué no dejás de vomitar?”
Porque claro, aunque las mamás, gracias a Dios, hayamos sacado del “hornito” a una criatura completa; esa criatura, necesita tiempo para desarrollarse completamente. Necesita nuestra dedicación para crecer y finalmente, tenemos que asegurarnos de hacer nuestro trabajo lo suficientemente bien, como para que de adulto, pueda valerse por si mismo.
-A qué viene esto, Potus?
A que hay gente que pretende que la Argentina funcione como un adulto exitoso, cuando es un bebé maltratado, desbastado, golpeado y mal alimentado durante largo tiempo.
Cuando están aburridos, critican con saña a quien está intentando alimentarlo y conseguirle la mejor calidad de vida y enseñarle la mejor forma para caminar.
Y como si fuese poco, hay quienes creen que el país no es un bebé sino, una caja fuerte que hay que saquear militando algún mal llamado derecho.