No soy un bot, soy un ser humano. Tampoco soy un troll, no me conoce nadie.
Trabajo en mi propio emprendimiento y además tengo un trabajo mucho más importante: un hijo que necesita un futuro Libre. Por eso, escribo mientras otros duermen.
También soy poeta de lo pequeño, optimista y autodidacta full time.
Creo en la fuerza transformadora de las ideas.
Creo que los argentinos de bien somos más y que son más las personas en este mundo que hacen el bien, que las que lo dañan.
A mi me impulsa la creencia apasionada de que puedo inspirar sentimientos nobles para hacer una Argentina Libre y más humana.
Me impulsa la creencia de cuestionarme todo lo que leo, investigar, googlear, porque opinar sin conocer los intereses que hay detrás de lo que se difunde; para mi no es “estar informado“.
Divulgar todo sin cuestionarlo para mi es no ser coherente con lo que quiero para mi país.
A mi no me da igual la manipulación de las personas, venga de donde venga.
Potus Amarillo es un llamado para los que sienten que “trabajar” no es sinónimo de perjudicar a otros sino, de contribuir al bien de todos.
Mi meta es escribir desde la esperanza, hablar de Libertad desde el respeto. Difundir lo noble y celebrar la belleza que encuentro en las palabras de los pensadores Libres.
Mi objetivo es sumarme a muchos de los anónimos que dan la batalla cultural. Esa que habla de poner a disposición del pueblo el conocimiento, para que cada uno elija lo que crea que es mejor.
Adoctrinados sin saber como funcionan las cosas, nadie elige verdaderamente.
De un tiempo a esta parte me nació la urgencia de ofrecer un espacio para difusión. Por eso, si escribís, o si investigaste algo que querés compartirlo, o si querés difundir un evento o un proyecto… no importa en dónde te encuentres contás con mi web para publicarlo gratuitamente.
Obviamente, siempre y cuando sea un contenido Libre, de calidad y con fuentes confiables.
No dudes en escribirme si querés publicar en esta web
Soy responsable de lo que escribo, no de lo que los lectores entienden.
Soy responsable de lo que escribo, no de los que los lectores proyectan.
Soy responsable de lo que escribo, no de la discapacidad afectiva de algunos lectores.
Soy responsable de lo que escribo, no de la falta de comprensión lectora de algunos.
Soy responsable de lo que escribo, no de lo que sienten los lectores cuando me leen.
Yo solo escribo.
Ojalá que algo aquí te ilumine un poquito el camino.
🪴 Potus